Samuel Diz Sierpes – Febrero 2012
Músico, investigador y gestor cultural. Título Superior de Guitarra Clásica por el Conservatorio Superior de Música “Manuel Castillo” de Sevilla y Postgrado en Music Business Administration por la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. Director de Música en el Claustro.
Fotografía Marcela Patiño: http://www.marcelaphoto.com/
Los problemas de financiación y falta de viabilidad de los proyectos culturales se han convertido desafortunadamente [¿o afortunadamente?] a día de hoy en trending topics en las noticias de la sección de cultura. Por ejemplo ayer mismo2, La Vanguardia incluía a doble página el acuerdo que El Liceu había llegado con sus trabajadores para la retirada del ERE anunciado en días anteriores.
Analizar de dónde venimos es imprescindible para saber quién somos. La política cultural desarrollada en España se basó en gran medida en la dependencia de la ayuda pública a través de sus diferentes organismos e instituciones, en muchos casos a fondo perdido3, sin una buena gestión que supiese sacar la mayor rentabilidad de las mismas.
Como consecuencia, durante décadas no ha existido la preocupación por buscar el desarrollo de proyectos culturales viables económicamente de forma autónoma, unido a la paulatina devaluación de la cultura, el arte y la profesión del artista por parte de la sociedad.
Por ello llega la reflexión: ¿hasta dónde han sido [bien] gestionadas estas ayudas públicas?
Ahora, momento en el que las vías de financiación tradicionales disminuyen o desaparecen, junto a la recesión económica general y otros problemas que afectan en concreto en el sector musical, como la piratería, llega el momento de autocrítica, reflexión y actuación. Hace unas semanas compartía en mi muro de facebook una pregunta: “¿Se encuentran en crisis las industrias culturales, especialmente la musical?” Entre todas las respuestas aparecieron cuatro términos y conceptos interesantes: catarsis, cambio, crisis en las estrategias y exceso de intermediarios.
Hoy_
Al igual que un cuarteto de cuerda tiene la clave del éxito en la unión y compenetración de sus miembros, la buena gestión cultural debe lograr el desarrollo máximo y optimización de las diferentes vías de explotación y recursos existentes:
• Vías de distribución.
La llegada de internet ha transformado al 100% la industria musical4. Por un lado se sitúa el desarrollo de las TIC, factor determinante en la productividad actual de una empresa de cualquier sector. Por otro, ligado directa y especialmente a la música, el desarrollo de nuevos modelos y empresas donde la música más que nunca es un medio y no un fin, como por ejemplo Spotify, iTunes o Youtube.
Por ello repito la célebre cita “desaprender para aprender”. El modelo digital ofrece nuevas posibilidades temporales, económicas y de formato que todavía no se están explotando. A lo largo de la historia el formato físico marcó el contenido presentado. Desde los discos de acetato hasta el cd, pasando por el vinilo o el casette, en cada momento la industria fue adaptando el producto artístico al formato. ¿Y por qué no ahora?
• Internacionalización
Las posibilidades que ofrece un mundo globalizado deben de ser analizadas y aprovechadas. Los mercados abren sus fronteras a nuevos artistas, creando así una retroalimentación cultural y económica. Debería de ser éste un punto importante en el que las sociedades de gestión, entre otras instituciones, concentrasen una parte de su trabajo, intentando promocionar la música española en el exterior, aumentando así los beneficios de exportación sobre importación.
Por otro lado, la elaboración de giras internacionales a partir de una estrategia desarrollada, tras un estudio previo del mercado, cuidando especialmente la localización y timing.
• Financiación
Como en toda obra artística, llegamos al clímax que todos esperan: ¡el dinero! Ese material preciado que parece encontrarse en vías de extinción, que ha obligado a gestores a desarrollar su capacidad más creativa e imaginativa en la búsqueda de nuevas estrategias de captación, generación y canalización de recursos. O en palabras del gestor Félix Lozano: “La Cultura fuera de la Cultura”.
Comencemos por analizar el patrocinio privado, o lo que es lo mismo, el arte de hablar de uno mismo a través de otro contenido. Aunque la financiación de un proyecto a través del apoyo privado no sea ninguna novedad, cada vez la creatividad en la comunicación y marketing alcanzan un desarrollo mayor, siendo las claves en la durabilidad del matrimonio entre ambas partes.
Por ello este arte comienza con las preguntas: ¿Entendemos a la empresa? ¿Comprendemos su lenguaje? ¿Sabemos comunicar nuestra oferta como para que sea, al mismo, su soporte de comunicación?5 Para dar respuesta a todas estas preguntas planteadas, más que nunca, debemos de conocer los principios y filosofía de cada proyecto, sus objetivos y tipo de rentabilidad (ya que no siempre es económica), un buen conocimiento crítico completo a través de un DAFO, y la localización más acertada posible del target común.
Esta vía se verá reforzada todavía más con la reforma de la Ley de Mecenazgo que ya ha anunciado el gobierno español a través de su actual Ministro de Cultura José Ignacio Wert, siendo uno de los objetivos del actual Gobierno. Reforma que desde el gremio de la gestión lleva solicitándose desde hace años.
La ley en vigor (año 2002) permite a los particulares desgravar hasta un 25% de IRPF de lo aportado a instituciones artísticas sin ánimo de lucro, y en el caso de las empresas, un 35% del impuesto de sociedades. Tan sólo en los acontecimientos de excepcional interés público6 el porcentaje alcanza el 100%.
Se buscaría entonces con la reforma de la ley un incentivo económico mayor a través de la deducción fiscal para el mecenazgo privado. Pero el debate comienza en ¿qué modelo tomar como referencia?
La propuesta presentada sitúa los ejemplos de Francia o Reino Unido como ejemplos a seguir, aumentando las deducciones fiscales del 25% al 70% para particulares, y del 35% al 60% para empresas. Es curioso encontrarse en Europa a Italia, un país donde el porcentaje es del 100%, siendo uno de sus iconos nacionales – el Coliseo romano – sustentando por un empresario de zapatos, Diego della Valle. En España, ciertas ramas solicitan una desgravación del 100%, especialmente en arte contemporáneo, debido a la difícil rentabilidad del mismo a través de su comercialización. Sobra decir que en Estados Unidos el porcentaje es del 100%, y también en Brasil con su Ley Rounet.
El problema surge al poner en manos del sector privado el timón de la cultura de un país, especialmente por dos razones: el apoyo a las actividades que mayor repercusión alcanzan y la concentración geográfica de las mismas. Crítica que ha tenido principalmente la Ley Rounet, aglutinando en São Paulo y Rio de Janeiro su actividad. Pero al mismo tiempo, tampoco es bueno que la cultura esté en manos del Gobierno “de turno”, como afirma Gregorio Marañón, Presidente del Patronato del Teatro Real.
Por ello la solución propuesta anteriormente citada podría ser una buena solución, buscando así un modelo mixto. Un modelo que al mismo tiempo exigirá la demanda de conscientes gestores culturales o creativos, con una base fundamental de conocimientos (económicos, de marketing y humanísticos) y experiencia, ya que finalmente es el responsable máximo, siendo el vehículo entre contenido y forma. En relación con el desarrollo de las tecnologías, y de nuevo como consecuencia de la situación económica actual, se ha puesto de moda en España en los últimos meses el crowdfunding a través de diferentes plataformas, siendo Verkami la más destacada hasta el momento. Un modelo que exige nuevamente una gran creatividad empresarial, de comunicación y de marketing, en muchas ocasiones mayor a un acuerdo de patrocinio único y exclusivo. Eso sí, sin olvidarse del tiempo que exige, ya que en esta microfinanciación o micromecenazgo colectivo son fundamentales las redes sociales.
Parece que el crowdfunding está de moda y es la revolución en las industrias culturales, pero realmente siempre ha existido. Por ejemplo en diferentes lugares de nuestra geografía, las fiestas populares de cada pueblo siempre se han celebrado con el dinero recaudado por las comisiones de fiestas de casa en casa, de vecino en vecino. ¿Qué es eso sino un ejemplo claro e crowdfunding? Tan sólo que ahora, una nueva forma de distribución (digital) lo pone de nuevo en relieve.
Otra vía, muy poco utilizada en España a excepción de las grandes ciudades, y aún así no de forma popular, es la donación en sala. Podemos aprender, o al menos analizar la inercia en Estados Unidos, donde numerosos conciertos se organizan a partir de recommended o suggest donation, recaudando en ocasiones una cifra superior al caché previo establecido. Aquí es el marketing el encargado de concentrar a la masa y el propio artista quien tiene la verdadera responsabilidad (¿ideal, no?) en el acercamiento, empatía y convicción artística hacia la audiencia. Un modelo que habría que analizar y reflexionar el por qué no funciona en España: ¿es un factor sociológico? ¿nunca se ha apostado por ello?, o ¿por la pseudogenialidad romántica del artista actual?
Como ejemplo de funcionamiento de estas últimas dos vías de financiación, es altamente interesante
analizar las dinámicas de trabajo del Kronos Quartet, una de las formaciones más eclécticas, prolíficas y activas de la historia de la música, para la que la donación siempre ha sido una base de sus proyectos. Como non-profit organization, la donación particular o empresarial apoya principalmente la comisión e interpretación de nueva música, desarrollando así una cultura completamente viva y transformada. Desde su web7, a partir de 50$ puedes ser friend del Kronos Quartet, hasta founder en cantidades superiores a los 50.000$. Al mismo tiempo también desarrollan campañas de crowdfunding a través de la plataforma americana más importante: Kickstarter. Recientemente se cerraba el pasado 31 de enero la campaña Under 30 Project / #5, donde alcanzaron reunir 12.300$ para la comisión de nueva música a un joven compositor.
Para finalizar este amplio apartado analicemos la definición que aparece en Wikipedia8 sobre
-Funding-
Funding is the act of providing resources, usually in form of money (financing), or other values such as effort or time (sweat equity), for a project, a person, a business or any other private or public institutions.
Es curioso observar como esta enciclopedia “viva” contempla tres recursos diferentes: dinero, esfuerzo y tiempo. Aparece reflejada de esta forma la clave en el desarrollo y éxito empresarial actual: la unión de sinergías.
• Acciones de transformación empresarial a través del arte.
La innovación empresarial en la búsqueda de unión de sinergias entre el mundo artístico y empresarial se está convirtiendo en una interesante vía de desarrollo, potenciando así las competencias de dos mundos en principio tan diferentes.
La introducción de artistas y pensadores en las organizaciones ofrece un especial crecimiento y desarrollo humano, al mismo tiempo que estimula la creatividad empresarial e innovación.
Dos ejemplos españoles:
_Conexiones improbables. Comunidad de iniciativas de investigación colaborativa y cocreación para la innovación y la responsabilidad social. Se basa en los paradigmas de la innovación abierta y en los principios de la intersección entre ámbitos, disciplinas y personas diversas9.
_Marenostrum. Proyecto empresarial privado basado en la transformación de nasas y redes para la pesca en muebles con un diseño totalmente personal e innovador. Marenostrum es la unión de sinergias de Juan Ares (diseñador de interiores) y J. J. Chicolino (empresario)10.
Mañana...
Para concluir, después de analizar de dónde venimos no podemos esperar más. Debemos de reflexionar y actuar.
En primer lugar, el Gobierno e instituciones deberían de analizar cual es su verdadero papel y responsabilidad. No podemos hacer nada en este sentido desde la individualidad más que manifestar y pronunciar las insatisfacciones y necesidades del colectivo: Control máximo de la piratería, creando especialmente programas de educación. Revisión del IVA, 18% en la actualidad. Sensibilización de públicos, despertando su curiosidad y capacidad crítica. Respeto inicial por la profesión desde los sistemas educativos, con verdaderos planes de estudios adaptados a la realidad profesional e igualdad en el marco europeo. Mayor exigencia a las sociedades de gestión junto al análisis y aceptación de estatutos de nuevas asociaciones, acabando así con el monopolio existente y aumentando la competitividad.
Cambio en la mentalidad y actitud de públicos y gestores, arraigada a una tradición donde la responsabilidad cultural está en manos de las administraciones públicas. Despertar en el sector empresarial un programa creativo atractivo, junto a una voluntad de devolver a la sociedad lo que ésta le ha ayudado a generar.
La continua búsqueda de talentos que ofrezcan a la industria musical un desarrollo y alzamiento de su valor en todos sus campos, desde la parte más artística en todas sus disciplinas escénicas, a la gestión, a través de su comunicación, estrategias, marketing y creatividad.
El planteamiento de la viabilidad de los proyectos culturales de forma autónoma, con una filosofía y objetivos claramente definidos junto al control máximo de la financiación a través de nuevas vías por explorar o las anteriormente expuestas, pero nunca vista la ayuda pública como parte esencial en la misma. Éstas deben de servir para actuar en tres direcciones: acelerar el desarrollo y presentación de un proyecto, aumentar su calidad y recursos, y/o disminuir (conservar para un próximo proyecto) mayor fondo privado.
Y para finalizar, preguntarse siempre cual es el motivo inicial de lo que uno está haciendo en todo momento, pudiendo perderse y descubrir nuevos caminos en el proceso, pero siempre con una meta clara y definida.
-----
1 Manual práctico para la búsqueda de patrocinio. Roberto Gómez de la Iglesia
2 Jueves, 23 de febrero de 2012.
3 Desde un punto de vista económico.
4 Reflexionemos sobre dos cuestiones: ¿Por qué se ha desarrollado antes y mejor la piratería que el uso legítimo de la música en internet? ¿Ha sido un problema de la industria? ¿De la propia sociedad? ¿O del Gobierno en sus no acciones, comunicación y educación? Quizás ahora ya es demasiado tarde...
5 Manual práctico para la búsqueda de patrocinio. Roberto Gómez de la Iglesia
6 Algunas de las últimas convocatorias son la Conmemoración del II Centenario de La Pepa, el IV Centenario de la muerte de El Greco o el VII Centenario de la Consagración de la Catedral de Santiago de Compostela
8 Wikipedia, 24 de febrero de 2012
9 http://conexionesimprobables.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario